Lesiones en el fútbol: las más comunes y las que requieren asistencia médica
Lesiones en el fútbol: de la fatiga y la contractura al esguince y la lesión de ligamentos, éstas son las que necesitan asistencia médica.
El fútbol es el deporte más popular en Italia y, por tanto, uno de los que estadísticamente causan el mayor número de lesiones en nuestro país. De hecho, hablamos de un deporte de contacto que expone inevitablemente a los jugadores al riesgo de sufrir lesiones o contusiones.
Pero, ¿cuáles son las lesiones más frecuentes en el fútbol? ¿Y cuáles son los plazos de recuperación de cada una de ellas? Empecemos por las más comunes para llegar a las más nválidas que pueden requerir el uso de ayudas médicas.
Trauma
Una acción en el fútbol expone al jugador a un enfrentamiento físico que a menudo incluye golpes contra los tacos de las botas del adversario. Además de los evidentes heridas, abrasiones o excoriaciones los músculos, las articulaciones y los huesos también pueden sufrir traumatismos.
Además, con frecuencia las consecuencias del traumatismo pueden ser un hematoma. Consiste en la formación de una mancha violácea en la parte lesionada, cuya causa hay que buscarla en la penetración de sangre entre los tejidos, que suele producirse pocos días después de la lesión.
¿Cómo recuperarse de esta lesión? En estos casos, basta con aplicar hielo y pomadas especiales en la zona afectada. Estos remedios alivian los síntomas en poco tiempo.
Fatiga muscular
Cuando juegas al fútbol, tensas constantemente los músculos. A veces puedes experimentar un dolor repentino, cuya causa podría ser una contractura involuntaria. Como en el caso de las lesiones, para estos episodios basta con hielo, pomadas adecuadas y reposo absoluto.
Contractura
Una contractura se produce por las mismas causas que la fatiga muscular. Sin embargo, en estos casos el músculo es incapaz de funcionar correctamente como consecuencia del aumento del volumen de fibrillas. No obstante, el dolor es leve y no excesivamente agudo.
Cuando se produce una contractura, se recomienda encarecidamente la inactividad total de la parte afectada, aunque no se trata de un accidente grave.
Estiramientos
Una extensión excesiva del músculo puede provocar un estiramiento, es decir, un alargamiento excesivo de las fibras musculares. Se trata de una lesión mucho más grave que el caso anterior. Un estiramiento provoca dolor agudo y espasmos, ya que el músculo ya no es capaz de albergar la elasticidad necesaria.
A pesar de ser una lesión más compleja, una distensión muscular también puede tratarse con los métodos clásicos descritos anteriormente. Para recuperarse totalmente, hay que abstenerse de hacer deporte durante 15-20 días.
Desgarro muscular
Mientras que el estiramiento consiste en el estiramiento excesivo de las fibras musculares, en el caso del desgarro llegan a seccionarse. La gravedad de la lesión se mide en una escala de tres grados en función de la cual cambian el tiempo de recuperación y el tratamiento necesario, en este punto de carácter fisioterapéutico.
Distorsión
Hasta ahora hemos analizado los accidentes relacionados con el sistema muscular. Los esguinces, en cambio, tienen que ver con los huesos, en particular la rodilla, el pie y el tobillo. De hecho, éstas son las articulaciones que más se cargan en el fútbol. Sin embargo, esto no excluye que las extremidades superiores también puedan verse implicadas en un accidente. Tras una colisión física o un movimiento antinatural, el hueso cambia y se hincha; la consecuencia inevitable es un dolor intenso.
Para una recuperación completa, el jugador debe someterse a repetidas aplicaciones de hielo, sesiones de fisioterapia y debe inmovilizar la extremidad afectada durante el resto del tiempo.
Lesión del ligamento de la rodilla
La rotura o lesión de los ligamentos cruzado y colateral de la rodilla es la lesión más grave para los futbolistas. De hecho, se trata de un accidente doblemente ligado a un esguince. De hecho, los ligamentos conectan las articulaciones a la estructura esquelética. La consecuencia de una lesión es un dolor intenso, la hinchazón del miembro y la imposibilidad de cargar peso sobre él.
Esta lesión es tan grave que puede ser necesaria una intervención quirúrgica. Obviamente, el tiempo de recuperación para curar el ligamento es muy largo.
Especialmente en el caso de lesiones que afectan a los huesos, como esguinces o lesiones de ligamentos de la rodilla, es imprescindible la inmovilidad completa de la extremidad. Por lo tanto, en estos casos es necesario momentáneamente un silla de ruedas. Pero, ¿cuál elegir? Quizá no todo el mundo sepa que existen muchos tipos de sillas de ruedas que varían en función de distintos criterios, como la estatura, el peso o el grado de autonomía del paciente. Por eso, consultar a expertos es siempre la mejor opción.
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